ASPECTOS TÉCNICOS DEL DEPORTE
IntroducciónUno de los fenómenos más importantes de nuestro siglo es, sin lugar a dudas, el deporte, tanto por su incidencia como por su enorme desarrollo; y a medida que crece su importancia también suscita una mayor controversia.
Maximiliano Trapero lleva a cabo un estudio semántico de la palabra deporte e indica: "el contenido semántico del campo deporte se fundamenta desde la primera etapa hasta finales del siglo XIX en la pertenencia constante del rasgo recreación, mientras que en el siglo XX, gira en torno a actividad competitiva con ejercicio físico y que se realiza con deportividad"
Tal afirmación nos proporciona los rasgos que se aceptan, universalmente, como asociados al concepto de deporte: competición, ejercicio físico, relación…, aunque no menciona otro muy importante: el juego. Y así, podemos considerar que el deporte se halla constituido por tres elementos: juego, ejercicio físico y competición. El orden de importancia de estos elementos y su significación guardarán relación con el tipo de deporte practicado.
A nosotros nos interesa el deporte educativo, y eso es lo que trataremos en los siguientes apartados.
El deporte se va iniciando, coincidiendo con la Educación Física y ambos se estructuran y brotan a partir del movimiento humano, aunque con orígenes culturales bien distintos.
Thomas Arnold puede ser considerado como el precursor de la actual concepción del deporte dentro de la educación, no realiza ninguna innovación, tan sólo se limita a tomar lo ya existente e introducirlo en el sistema educativo, procurando que el deporte sea un medio para la formación de la personalidad y el carácter; lo verdaderamente esencial en su obra fue hacer del deporte más que un juego "un estilo de vida ".
Situación motriz: realización de una actividad en la que la acción y el movimiento, no sólo mecánico sino también de comportamiento, deben necesariamente estar presente y constituir parte inseparable de la tarea.
Juego: participación voluntaria con propósitos de recreación y con finalidad en sí misma.
Competición: deseo de superación, de progreso, de rendimiento elevado, bien para vencerse a sí mismo o al contrario.
Reglas: que definan las características de la actividad y de su desarrollo.
Institucionalización: se requiere conocimiento y control por parte de una instancia o institución, generalmente denominada federación, que rige el desarrollo y fija los reglamentos del juego.
Para acabar de perfilar el concepto de deporte y constatar su amplitud, su clasificación constituye un factor de gran importancia. Son muchas las clasificaciones existentes, todas ellas con ciertos criterios propios y, en la mayoría de los casos, no coincidentes, pero todas con la finalidad de aclarar y situar los diferentes deportes en un marco de referencia:
Matveyev, L.P., utiliza un criterio basado en el tipo de esfuerzo físico requerido por cada deporte, estableciendo cinco grupos:
Deportes acíclicos: Son aquellos en los que predominan la fuerza veloz y los esfuerzos de intensidad máxima.
Saltos (gimnasia, esquí, longitud,...)
Lanzamientos (jabalina, disco, peso,..)
Levantamientos (Halterofilia)
Velocidad (sprints).
Deportes con predominio de la resistencia:
Movimientos de intensidad submáxima (medio fondo, natación 100 y 400m)
Movimientos de intensidad superior y media (5000m o más, natación 800 y 1500m)
Deportes de equipo:
Deportes de considerable intensidad, pero con la consideración de ser abandonados de tiempo en tiempo (baloncesto, balonmano,...)
Deportes de considerable duración con pocas interrupciones (fútbol, hockey hierba,...)
Deportes de combate: En ellos se da el enfrentamiento directo entre individuos (boxeo, esgrima, lucha,...)
Deportes complejos y pruebas múltiples: Son aquellos en los que el deportista realiza esfuerzos muy diversos y amplios (pentatlón, decatlón, gimnasia deportiva,...).
Bouchard, realiza una clasificación del deporte atendiendo a tres categorías:
Deportes colectivos: donde debe existir al menos dos equipos de dos jugadores.
5. Consideraciones didácticas generales
La programación de las actividades deportivas a nivel de iniciación debe atenerse a unas directrices didácticas, como son:
Selección de las tareas que se han de enseñar en función de las capacidades básicas de los alumnos.
Las actividades serán planteadas en un contexto de juego, y se premiará la participación y el esfuerzo, con independencia del resultado.
Distribución progresiva de las tareas, según la complejidad y el esfuerzo que comportan.
Uso adecuado de la transferencia.
Control del cumplimiento de las normas del juego.
Fomento de la cooperación y del trabajo en equipo.
Asunción paulatina de responsabilidades por parte de los alumnos en las tareas de organización.
Polivalencia en las actividades.
Coordinación de los intereses de los alumnos y las posibilidades de los recursos e instalaciones.
Vinculación de los planteamientos de enseñanza con la situación real-
El interés por el perfeccionamiento técnico tiene que surgir como una necesidad de la situación real de juego.
Énfasis en el desarrollo de las cualidades físicas, ya que se ha de partir de una buena base para adquirir una buena técnica.
Introducción progresiva y adecuada de la competición como elemento didáctico.
Para que alumno pueda inclinarse por uno u otro deporte, siempre que sea posible, se deben dar algunas alternativas.
En algunas circunstancias se realizarán adaptaciones de la habilidad específica que se pretende enseñar, con el fin de adecuarnos a las posibilidades de ejecución del alumno. Estas adaptaciones se pueden realizar tanto a nivel reglamentario, o bien en cuanto a las condiciones de práctica para que proporcione una mayor participación activa.
La enseñanza de la actividad deportiva debe presentarse de manera globalizada, es importante la utilización de juegos de aplicación del deporte que se está enseñando.
En general, podemos decir que en los juegos de iniciación deportiva o predeportivos tendremos que tener en cuenta la adaptación de las reglas en cuanto a:
Número de jugadores: en deportes con balón, opinamos que no es recomendable formar equipos con un número de componentes según la reglamentación, es preferible reducirlo. El "3 contra 3" nos parece un número adecuado puesto que permite la participación activa de todos los niños y comporta situaciones de juego básicas: (1 contra 1) y (2 contra 1), facilitándole el desarrollo de los mecanismos perceptivos, de decisión y ejecución.